El desafío social

En estos momentos, los servicios sociales, como se puso de manifiesto en la Conferencia de Copenhague, de 1995, se confirmó en la de Lisboa, de 2001, y asume el Partido Popular, vienen marcados por una serie de tendencias derivadas básicamente del nuevo protagonismo de lo local, la emergencia de nuevos fenómenos sociales, la intensificación de la demanda, y las nuevas líneas de reflexión social.
El nuevo protagonismo de lo local, que algunos interpretan como una reacción frente a la globalización, adquiere en nuestro marco europeo una importancia notable, sobre todo al considerar el destacado papel que las ciudades tienen en la construcción europea, y el marcado carácter urbano que tienen los procesos de exclusión social, particularmente acentuado en nuestro caso, donde las tres cuartas partes de la problemática social aragonesa se da en Zaragoza capital.
Con respecto a los nuevos fenómenos sociales emergentes, la situación de dependencia, motivada por el incremento de la esperanza de vida, las diferentes pautas familiares, y la inmigración, por citar solo algunas de las causas más importantes, componen un panorama que reclama cada día más la atención pública, y para el que no se está adecuadamente preparado.
Por otra parte, el efecto derivado de los fracasos en otros sistemas de protección, que afectan, entre otros, al ámbito del empleo, de la salud, de la vivienda, o de la educación escolar, está repercutiendo de manera indirecta, pero muy poderosamente, sobre el sistema de protección social, produciendo una enorme intensificación de la demanda.
Y la exigencia de calidad para todos los servicios, el papel creciente de las acciones privadas, el permanente debate sobre la coordinación, tantas veces proclamada y tan pocas alcanzada, y las nuevas reflexiones sobre el universalismo y la sostenibilidad, abren ante la política social un debate nuevo al que es preciso dar adecuada respuesta.
A este debate y a esta llamada ha respondido Domingo Buesa asumiendo el desafío y haciendo de la preocupación por las personas el eje central de todo su programa electoral, transformando en él la política clásica de acción social en política de promoción personal para todos los ciudadanos.



Deja un comentario